Tras su último concierto en República Dominicana hace cuatro años, los seguidores del cantante Ozuna se reencontraron con el artista de música urbana la noche del Sábado Santo en el anfiteatro Altos de Chavón, donde repasó sus éxitos.
Su conexión con el público y dominio escénico son innegables. Si a eso se le suma una banda en vivo, un gran montaje tecnológico y bailarines, como ocurrió en esta ocasión, el resultado es un show de lujo.
Pocos minutos antes de las 10:00 de la noche, las luces se apagaron y sonaron los acordes de «Qué pena», canción con la que el dominico-puertorriqueño salió al escenario.
«Monotonía», «Caramelo», «Baccarat», «Baila Baila», «Despeinada» y «La modelo» fueron algunos de los éxitos que interpretó seguido, sin interactuar con el público, lo que le permitió mantener a tope la emoción y algarabía de la multitud en todo momento.
Tras la descarga de energía, el ambiente se tornó sentimental cuando anunció «Amor genuino», en el que habla de la vulnerabilidad de una persona enamorada, mientras en la segunda parte del concierto hizo un recorrido por algunos temas que marcaron sus inicios en la música.
INVITADOS ESPECIALES
El primero de su noche en Chavón fue Omega El Fuerte, con quien interpretó el mambo «Llegó la para», mientras el puertorriqueño Darell también se unió al músico para cantar «Lollipop» remix, con más de ocho millones de reproducciones en YouTube.
La gran sorpresa fue Anuel AA, quien fue recibido por una multitud emocionada. Los compatriotas cantaron juntos «La ocasión», «Te parto», «Adicto», el estribillo de «Bad boy» y «China».
El momento tierno llegó cuando Ozuna subió al escenario a su hija Sofía para dedicarle «Mi niña».
«Con esta canción quiero darle las gracias a Dios por ustedes, por mi carrera y todos los que hacen esto posible», manifestó.